En la mitad de la década de los cincuenta la Fórmula 1 ya contaba con prestigio mundial, los grandes fabricantes buscaban la gloria al querer imponerse en el campeonato.
En 1954 Mercedes Benz envió a las pistas el W196, un auto fuera de lo común para la época. Por vez primera un Fórmula 1 tenía las ruedas cubiertas; una muestra de desarrollo aerodinámico que aunque aún en sus inicios, sentarían las bases para lo que es la tecnología actual en ese aspecto.
La "flecha de plata" debutó en el circuito de Reims (Francia), logrando la victoria, el segundo lugar y el récord de vuelta. Desde entonces el dominio del W196 se hizo abrumador, al lograr el campeonato de ese año a manos del genial Juan Manuel Fangio.
En 1955 la historia fue similar. Fangio, que ya tenía como compañero de equipo a otro grande, Stirling Moss, se llevaron el título cómodamente. Sin embargo, el fin de este auto estaba cerca. Una tragedia acabó con esta joya mecánica.
El 11 de junio de 1955 ochenta personas murieron luego de un accidente de una de estas flechas de plata. Mercedes decidió retirarse de la categoría al finalizar la temporada, ausencia que duró 40 años. De esta manera terminó la historia de uno de los más grandes autos de competencia de todos los tiempos.
El W196 tenía un motor de 8 cilindros e
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